Millennials, boomers, generación X… todos pertenecemos a una generación marcada por vivencias únicas, avances tecnológicos y cambios culturales que moldearon nuestra manera de ver el mundo. A partir de 2025, comienza una nueva etapa, que es la Generación Beta. Un grupo que no crecerá con la tecnología, sino dentro de ella.
Nombrar generaciones no es un capricho de marketing. Es una herramienta que sociólogos, demógrafos y analistas han utilizado por décadas para entender cómo ciertos contextos históricos y transformaciones sociales impactan en el pensamiento colectivo. Las guerras, la televisión, internet, los smartphones, el cambio climático, la pandemia o la inteligencia artificial, cada evento deja huella en quienes lo viven durante su infancia y adolescencia.
Hasta ahora, los reflectores estaban sobre la Generación Alfa, los nacidos entre 2010 y 2024. Pero a partir de este año, 2025, se abre un nuevo capítulo, el inicio de la Generación Beta. No se trata solo de una nueva etiqueta generacional, sino es el mayor punto de inflexión en la historia reciente, porque por primera vez, una generación completa será criada en un entorno donde la inteligencia artificial, la automatización, el control de datos y la hiperpersonalización no serán una novedad sino lo normal.
¿Qué es la generación Beta?
La Generación Beta es el nombre que se empieza a usar para identificar a los niños nacidos a partir de 2025. Su denominación continúa el orden alfabético iniciado con la Generación Alfa (2010–2024), pero no es solo una cuestión de letras, este grupo marcará un punto de quiebre en la forma en que entendemos el desarrollo humano.
Algunos expertos vinculan el término «Beta» con el lenguaje tecnológico. En el mundo del software, una versión beta es aquella que aún está en prueba, en constante ajuste y evolución y justamente así se perfila esta generación, adaptativa, moldeada en tiempo real por avances científicos, datos, inteligencia artificial y entornos digitales dinámicos.
Aunque su rango exacto está aún por definirse, se estima que abarcará desde 2025 hasta 2039. Pero, como ocurre con todas las generaciones, su identidad no dependerá solo de fechas, sino de los eventos globales, las tecnologías emergentes y los cambios culturales que les toque vivir. Lo que es seguro es que la Generación Beta crecerá en el umbral de una nueva era,donde lo humano y lo digital se entrelazan desde el nacimiento.
¿Cómo será la Generación Beta?
Todo indica que la Generación Beta crecerá en un entorno profundamente distinto al de sus antecesores. No solo serán nativos digitales, sino que también convivirán desde su infancia con inteligencias artificiales conversacionales, asistentes robóticos, experiencias inmersivas y dispositivos conectados a su entorno físico y emocional. La tecnología no será una herramienta, será parte de su contexto natural.
Otra gran diferencia estará en su relación con el planeta. En medio de una crisis ambiental en curso, se espera que adopten desde pequeños hábitos ligados a la sostenibilidad. No será una elección, será un valor aprendido desde casa, la escuela y las marcas. El consumo responsable y la conciencia ecológica podrían formar parte de su identidad generacional.
También vivirán una transformación profunda en la forma de aprender. La educación tradicional será reemplazada, o al menos complementada, por sistemas adaptativos que personalizan los contenidos y los ritmos de estudio. Cada niño Beta podrá avanzar según sus habilidades, intereses y necesidades, en lugar de ajustarse a un modelo estándar. Además, crecerán en un entorno más abierto, con mayor diversidad de referentes y discursos más inclusivos. La equidad, el respeto y la libertad de identidad no serán debates nuevos, sino parte de su día a día.
Las generaciones y su ADN cultural
| Generación | Años de nacimiento | Contexto histórico clave | Rasgos predominantes |
|---|---|---|---|
| Baby Boomers | 1946–1964 | Posguerra, expansión económica y auge del consumo | Trabajo duro, estabilidad, foco en bienes materiales |
| Generación X | 1965–1980 | Guerra Fría, neoliberalismo, transición digital | Independientes, escépticos, adaptables |
| Millennials | 1981–1996 | Internet, globalización, crisis económicas | Digitales, progresistas, valoran experiencias |
| Generación Z | 1997–2009 | Redes sociales, polarización política, cambio climático | Activismo, creatividad online, conciencia ecológica |
| Generación Alfa | 2010–2024 | Hogares hiperconectados, nacimiento de la IA | Nativos digitales puros, aprendizaje tech desde temprana edad |
| Generación Beta | 2025–2039 (estimado) | IA integrada, hiperpersonalización, ciudades inteligentes | Humanos aumentados, crianza con datos, sostenibilidad desde la infancia |
Un nuevo humano, diseñado por datos
Esta generación crecerá en un entorno donde la inteligencia artificial no será una herramienta, sino una presencia permanente. Desde la cuna, sus rutinas serán registradas, optimizadas y analizadas. Algoritmos definirán su ritmo de sueño, sus planes de alimentación, su desarrollo cognitivo.
Toys con sensores, apps de monitoreo, diagnósticos predictivos. Nada queda al azar.
Y mientras eso ocurre, sus emociones, decisiones y vínculos también estarán influenciados por sistemas invisibles. ¿Qué canciones escuchan? ¿Qué colores prefieren? ¿Qué contenido se les recomienda? Todo se ajustará en tiempo real para maximizar su “engagement”.
¿Qué implica esto para las marcas?
- La hiperpersonalización será lo normal. Los niños beta no esperarán productos, sino buscarán soluciones diseñadas para ellos, en tiempo real, ajustadas a su identidad digital.
- El branding será ético o no será. Sus padres no comprarán marcas, comprarán valores. La transparencia, la privacidad y el impacto ambiental no serán diferenciales, serán mínimos aceptables.
- El contenido será inmersivo y emocionalmente inteligente. No bastará con captar la atención, habrá que entender y respetar la emoción detrás de cada interacción.
- El juego será el lenguaje dominante. El metaverso, los entornos gamificados y las plataformas de simulación educativa serán terreno fértil para conectar o alienar.
¿Qué deben hacer las empresas hoy?
- Invertir en comprensión generacional real. No se trata de etiquetar por edad, sino de entender los códigos culturales emergentes.
- Diseñar con ética desde el inicio. No basta con “cumplir” regulaciones. Las empresas deben asumir un rol activo en la protección de esta generación.
- Fomentar espacios de desconexión consciente. Las marcas que ofrezcan herramientas para el equilibrio digital serán aliadas, no intrusos.
- Co-crear con las nuevas generaciones de padres. Escuchar, dialogar y adaptar. El marketing unidireccional murió.
Datos que respaldan la llegada de la Generación Beta
- Según proyecciones de la ONU, en 2025 nacerán más de 130 millones de bebés en el mundo, todos potenciales miembros de la Generación Beta.
- De acuerdo con IDC, para 2026 el 80% de los hogares en países desarrollados contará con al menos un asistente de inteligencia artificial integrado en sus dispositivos cotidianos.
- Un informe de HolonIQ estima que el mercado global de edtech con IA alcanzará los 404 mil millones de dólares en 2030, impulsado por sistemas de aprendizaje adaptativo que esta generación usará desde preescolar.
Una generación, un experimento
La Generación Beta no solo será un nuevo mercado, será una nueva humanidad. Criados en medio de crisis climática, avances científicos sin precedentes y dilemas éticos profundos, estos niños serán el mayor experimento sociotecnológico de la historia moderna.
Es una generación que llega con un contexto completamente distinto al que hemos conocido. Nacerán rodeados de inteligencia artificial, tecnología avanzada y un mundo que mezcla lo digital con lo real desde el primer día.
Esto representa un gran reto para todos, como las marcas, escuelas, gobiernos y familias. No se trata de adivinar el futuro, sino de empezar a construirlo con responsabilidad desde hoy. Pensar en cómo educamos, qué valores transmitimos y qué tipo de experiencias ofrecemos.
Porque más que futuros consumidores, serán las personas que tomarán decisiones, liderarán cambios y definirán el rumbo del mundo. Y acompañarlos desde ahora, con empatía y visión, es el paso más importante que podemos dar.
Descubre cómo conectar con la Generación Beta.
